En este libro se definen alrededor de 600 fobias y de 400 manías, con su etimología en griego o latín. Es muy importante conocer las manifestaciones clínicas, aplicar los criterios diagnósticos (según CIE-10 y DSM-IV-TR) y hacer un buen diagnóstico diferencial para llegar al diagnóstico correcto, puesto que el tratamiento (farmacológico y/o psicológico) y el pronóstico pueden ser muy diferentes de unos casos a otros. El tratamiento es necesario o conveniente cuando las fobias o las manías producen un malestar emocional clínicamente significativo o interfieren acusadamente en la vida normal del individuo, en el ámbito familiar, en sus relaciones académicas, laborales o sociales.
Dentro del Apartado de fobias se describen la agorafobia, la fobia social y más de 600 fobias específicas. El término fobia generalmente se usa como sufijo indicando temor específico a lo que se indica el prefijo. Las fobias específicas se pueden agrupar en varios tipos: animal, ambiental, sangre-inyecciones-daño y situacional.
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